Los proyectos audiovisuales son realmente complejos. No diremos que difíciles si conoces la temática, pero sí requieren de mucho esfuerzo, ideas novedosas, actualización constante de personal y herramientas…
Y muchas otras cosas sin las que el trabajo de las productoras no podría salir adelante, por ejemplo el trabajo de edición audiovisual. ¿Y cuál es la importancia de la edición de vídeos?
Comencemos indicando que los proyectos audiovisuales se dividen en tres fases o etapas.
La primera es la de creación y está relacionada con todos los pasos que se han de llevar a cabo para que la idea esté formada pro completo. Guiones, storyboard, localizaciones, permisos, alquiler de equipo, casting entre otros.
La segunda es el rodaje, la filmación de las secuencias brutas, llevada a cabo cuando todo esté listo para ello.
La última de las etapas es la edición o postproducción audiovisual. Se trata de trabajar con todo el material bruto que hemos rodado para transformarlo en el resultado final. Eliminación de metraje, mejora de calidad, inclusión de audio, voz en off, banda sonora, efectos especiales.
Está claro que todas las fases de los proyectos audiovisuales son importantes, pues sin una de ellas sería imposible conseguir los mismos resultados que si se incluyese en el proceso.
Sin embargo, no podemos negar que la edición de manos de auténticos profesionales sirve para crear auténticas obras de arte con un material que otros podrían haber aprovechado mucho menos.
Postproducir un vídeo es unir las piezas sueltas para convertirlas en un todo; es terminar un puzzle que llevamos días armando.
Pero no solo eso, son muchas las decisiones que se toman al apagar las cámaras, cuando ya parece que está todo hecho. Ritmos de montaje, secuencias, tipo de música, momentos para incluir cada elemento, efectos especiales imposibles de lograr físicamente.